Esta especialidad nació en EEUU y se expandió a varios países, llevando 60 años de desarrollo e investigación clínica.
Según la definición oficial:
La Danza Movimiento Terapia (DMT) pertenece al grupo de las terapias artístico creativas, y se basa en el uso psicoterapéutico de la danza y el movimiento para fomentar la integración emocional, social, física y cognitiva de la persona, promoviendo la salud y el crecimiento personal.
En resumidas cuentas, es una psicoterapia que integra la danza y el movimiento, junto con la palabra, en el proceso terapéutico. Y como toda terapia, persigue la mejora de la calidad de vida de la persona.
¿Por qué danza y movimiento?
La DMT parte de la premisa de que el cuerpo y la mente están conectados, son un todo. Así, la mente se refleja en el cuerpo y movimiento, y viceversa, el cuerpo y movimiento influyen en la mente.
Pensemos en alguien andando por la calle, con los hombros hundidos, mirando hacia el suelo, con movimientos lentos, etc. Sin mediar palabra con esa persona supondremos que está triste y que algo pasa en su vida.
La DMT usa esta información no verbal en el proceso terapéutico. Pensemos que el movimiento nuestra forma de comunicación más básica. Por una parte, permite al terapeuta acceder y entender a la persona (a partir del análisis del movimiento, de la postura,…), y por otra, permite que la persona exprese y comunique sus emociones y pensamientos. Pero el movimiento no sólo es utilizado como comunicación no verbal, sino que se usa como herramienta psicoterapéutica, ofreciendo la posibilidad a la persona para que explore, descubra, experimente,…sus propias sensaciones y les otorgue un significado, una experiencia, etc. Y es que el movimiento es inherente a nosotros. Por lo tanto, a través de él nos relacionamos con nuestro entorno, los otros y nosotros mismos.
¿Quién se beneficia de la DMT?
La danza movimiento terapia tiene multitud de objetivos, dependiendo de la población con la que se trabaje: puede fomentar el autoconocimiento, la relación con los otros, la gestión emocional, reducir el aislamiento social, la ansiedad y depresión, fomentar la intención comunicativa, etc.
Por tanto, cualquier persona puede beneficiarse de la danza movimiento terapia -niños, adultos, tercera edad- ya sea como crecimiento y desarrollo personal o como intervención en psicopatologías (Trastorno del Espectro Autista, TDAH, Alzheimer y otras demencias, salud mental, etc).
Así, la DMT es aplicada en contextos de salud, educativos, servicios sociales y consulta privada, de forma individual o grupal.
Es importante diferenciar la danza movimiento terapia de la danza educativa, y es que la danza y el movimiento que tienen lugar en las sesiones de danza movimiento terapia no son movimientos pre-escritos, es decir, no se trata de aprender a bailar, o aprender movimientos concretos.